Julio Postigo, editor del libro “Naturaleza y Sociedad: perspectivas socio-ecológicas sobre cambios globales en América Latina”, nos brinda sus reflexiones respecto a los temas centrales que se abordan en la publicación.

Los dramáticos impactos del llamado Niño costero, en el Perú durante el verano de 2017, son, desgraciadamente, un recordatorio de las interrelaciones entre los cambios globales ambientales (en los aspectos físicos, climatológicos y biológicos) y los también dinámicos procesos sociales, políticos y económicos. Es decir, vivimos sujetos a las fuerzas de la naturaleza y, al mismo tiempo, a los cambios en la dinámica social; aunque los efectos de aquellas fuerzas suelen afectar con mayor fuerza y perversidad a los desposeídos y marginales del orden social establecido.

El análisis de las relaciones entre naturaleza y sociedad ha retomado notoriedad debido a los cambios globales en curso y al reto que éstos han planteado a la sostenibilidad planetaria en general y, al capitalismo en particular. Las intrincadas relaciones entre naturaleza y sociedad se hacen aún más complejas cuando se consideran los múltiples niveles en que ocurren (y cómo varían entre estos) y las múltiples escalas que abordan. Es por ello, que se deben diseñar perspectivas de investigación que incluyan todos estos aspectos; lo que permitiría llegar a conclusiones más holísticas, incluso transdisciplinarias. Este libro presenta doce casos de América Latina en donde los cambios socioambientales son resultados de las interacciones y las fuerzas subyacentes a los cambios globales. Hay aportes de investigadores trabajando en México, Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Bolivia, Chile y Argentina. Cada estudio se ubica en el marco analítico de las interacciones entre sociedad y naturaleza. Además, el volumen provee acceso a las diversas literaturas disciplinares, permitiendo a estudiantes y estudiosos buscar interrelaciones y afinar el marco con sus propias experiencias.

Los retos para usar un marco socio-ecológico son muchos; no obstante, esta perspectiva permite analizar eventos y consecuencias de difusa o ambigua causalidad. Más aún, algunos de los autores de este libro amplían la perspectiva mediante la inclusión (aún tímidamente) de enfoques históricos, comparativos, y de la justicia ambiental. Las transformaciones futuras van a tener dimensiones sociales y ambientales, así que los investigadores deben buscar mecanismos para estudiar la complejidad de los sistemas acoplados naturaleza-sociedad. A las conclusiones más holísticas, incluso transdisciplinarias, que se obtendrían con esta perspectiva, se agrega una aproximación a la comprensión tanto de propiedades emergentes, cambios abruptos sorpresivos y transformaciones sistémicas, como de eventos y consecuencias de causalidad múltiple e intensidad indeterminada. Las dimensiones socioambientales de las transformaciones futuras requerirán la comprensión de la complejidad como sistema socio-ecológico tal como lo ilustra este libro. En este sentido, el libro es un punto de inicio y una invitación al uso crítico de esta perspectiva con investigaciones de nuevos casos que amplíen la cobertura territorial e ilustren interacciones entre naturaleza y sociedad.

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