Escrito por: Augusto Castro, Director de INTE-PUCP.

Nuevamente conmemoramos el Día Mundial del Ambiente este 5 de junio como un momento importante en el que se hace necesario reafirmar su defensa frente a los peligros que se presentan en la actualidad. Todos somos conscientes de los problemas que sufre el ambiente con el aumento de los gases de efecto invernadero.

En términos generales, si bien existen inmensos esfuerzos por reducirlos expresados en decenas de acuerdos nacionales que buscan mitigarlos, falta todavía mucho por hacer. Incluso, hay retrocesos graves que hacen pensar que las terribles consecuencias del Cambio Climático no se detendrán. No hay que ser muy inteligente para advertir que la guerra por el control del petróleo involucra a muchas naciones en el mundo lo que indica también que la utilización de residuos fósiles no ha cesado ni cesará en lo inmediato.

En épocas de dificultad como la que vivimos donde los acuerdos mundiales sobre reducción de los gases de efecto invernadero parecen no ser parte de la agenda política de muchos países conviene reiterar y reafirmar la necesidad de contar con sólidas políticas públicas de mitigación y de adaptación. Estas se vuelven fundamentales en el esfuerzo de reformar la práctica humana actual de contar con industrias basadas en residuos fósiles.

Este es un esfuerzo inmenso y que demanda perspectiva y perseverancia. Conviene resaltar en esta perspectiva la importancia de la Ley Marco sobre el Cambio Climático que fue aprobada el 16 de marzo del presente año y que ha sido rubricada por el Presidente de la República el día 22 de mayo. La ley está en clara sintonía con los acuerdos tomados en la Conferencia de Partes -COP- realizada en Paris en el 2015. El Perú se transforma en el primer país latinoamericano que aprueba este tipo de legislación que naturalmente beneficia a la biodiversidad, los ecosistemas marinos y terrestres, la gestión del territorio y de los recursos naturales, y que defiende con nitidez políticas de mitigación y de adaptación al Cambio Climático que el Perú requiere.

En el Perú hay muchas cosas por hacer y esta celebración y la dación de la ley ofrecen una oportunidad muy importante para desarrollar políticas de adaptación que nos ayuden a enfrentar diversos problemas como el derretimiento glacial, la gestión de los recursos hídricos, el impulso al desarrollo de las energías limpias, el manejo de bosques y de la biodiversidad, entre otros. Debemos comprender que la ley promulgada debe complementarse con un movimiento de la propia sociedad que tome conciencia del peligro del Cambio Climático en el Perú.

La universidad no es ajena a estas tareas y deberá cumplir a cabalidad su responsabilidad de educar y de investigar con seriedad los fenómenos que se nos presentan y las implicancias que de ellos se derivan. Esta celebración del Día del Ambiente obliga a la universidad a un compromiso con el planeta y con la sociedad peruana que atraviesan momentos de verdadera dificultad.