Recientemente, nuestra Universidad recibió la visita de la Dra. Patricia Fuller, Embajadora para el Cambio Climático de Canadá, quien fue una de las ponentes invitadas a un conversatorio sobre el futuro de las energías renovables y los desafíos frente al cambio climático, organizado por el INTE-PUCP.

¿Por qué el cambio climático es una problemática que todo país debe incluir en su plan estratégico de desarrollo? El cambio climático es un problema que todas las naciones deben confrontar, porque si no se toman medidas al respecto, a futuro podríamos encarar un problema aún mayor Este consistirá en que nuestro planeta no se dará el abasto suficiente para sostener una calidad de vida decente para los seres vivos, en especial para el ser humano. Por ello, las investigaciones científicas indican que debemos reducir el índice de emisiones de dióxido de carbono (CO2) por lo menos a la mitad de la cantidad actual (aproximadamente, 387 ppm), en los próximos 11 años. De ese modo la temperatura del planeta se mantendrá estable, manteniendo el calentamiento global dentro de los límites seguros para la población.

Todos deben participar activamente en la búsqueda de soluciones, pues este fenómeno tendrá un impacto en distintos rubros de producción e industria, como lo es el sector agropecuario, por ejemplo.

¿Qué desafíos enfrenta Latinoamérica en la problemática ambiental? Enfrentar este problema es complejo, pues requiere de mucha coordinación entre diferentes organismos gubernamentales y de actores sociales involucrados en el contexto, como las comunidades con las que se trabajará puntualmente, para la implementación de medidas de contingencia. La idea es que todos puedan participar de manera activa en la búsqueda de soluciones, lo cual puede ser algo complicado al momento de generar acuerdos, pero que puede ser solucionado con un diálogo pleno y con el intercambio recíproco de conocimiento.

Por otro lado, existen valiosas oportunidades para que los países puedan empezar con su transición hacia el uso de energías limpias y una economía baja en carbono, ya que las innovaciones tecnológicas se han vuelto cada vez más accesibles. En el caso de Perú, el uso de este tipo de energías mejoraría la calidad de vida de las personas por medio de un sistema de transporte sostenible.

¿Todas las energías renovables resultan amigables para la población? Como en cualquier tipo de proyecto que involucre intervenir un espacio, este tiene que implementarse en colaboración con las comunidades locales, pues debe generarse un acuerdo conjunto previo para evitar problemas. Uno de los ítems importantes a considerar al realizar proyectos de esta índole, es realizar un estudio de impacto socioambiental, el cual brindará resultados en distintas variables, incluso en algunas que pueden parecer triviales pero que generan gran preocupación en el público, como los cambios en el paisaje que pueda causar la intervención. Por ejemplo, en Canadá, algunas comunidades se han mostrado en contra de proyectos de energía solar, puesto que los paneles solares ocupan un espacio considerable y para muchos no resultan estéticos, lo cual puede afectar a la imagen de la comunidad teniendo un impacto negativo en el turismo.

¿Cuál cree que es el rol de la mujer en la lucha por la sostenibilidad? Está claro que, si no tienes una participación equitativa en la toma de decisiones sobre cualquier proceso, no puedes esperar lograr alcanzar todo su potencial ni tener una perspectiva más amplia respecto a la búsqueda de soluciones. Es muy importante que las mujeres participen de manera activa en proyectos de energías renovables o en discusiones sobre la adaptación del entorno al cambio climático. Por ejemplo, actualmente estamos trabajando en un proyecto en colaboración con el gobierno peruano, la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional), la Autoridad Nacional del Agua y Sunass. Esta iniciativa se llama “Igualdad de Género y Seguridad Hídrica”, la cual tiene el gran objetivo de generar compromisos específicos para aumentar la participación de las mujeres en la toma de decisiones sobre la gobernanza del agua.

Fuente: Punto Edu